El fútbol es ese deporte que juegan 11 contra 11 y siempre gana ESPAÑA.
Ayer hicimos historia. Nos enfretamos a Italia, nuestro primer rival en la Eurocopa, en una final que acabó en goleada española, y es que no se gana 4-0 a una tetra-campeona del mundo todos los días. Los nuestros practicaron un excelso juego en todos los aspectos, empezando por la consistencia defensiva. Ramos y Piqué, centrales consagrados de la Roja, hicieron un partido impecable. En el centro del campo no fuimos menos. Xavi, Iniesta, Silva, Busquets... hiceron una grandísimo partido creando y repartiendo juego. Arriba jugó Fábregas, que también estuvo a un magnífico nivel. Silva, Jordi Alba, Torres y Mata fueron los goleadores del partido. En la primera parte, David Silva remata de cabeza un balón que le venía de Fábregas y Jordi Alba, que ha hecho una enorme Eurocopa y se ha consagrado en el lateral derecho de la selección, puso el 2-0 tras un pase preciso, en el momento justo, de Xavi Hernández, uno de los mejores sobre el césped. En la segunda, más de lo mismo. El árbitro no nos favoreció nada, pues no pitó un penalti clarísimo por mano dentro del área de los italianos, que además debía ser expulsión. Pero todo esto se vio nublado con el gol de Torres en el 84' y el de Mata en el 88'. España ya era campeona de Europa otra vez, la tercera en toda su historia, haciendo un triplete histórico, y además habiendo quedado campeona del mundo en 2010.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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