Ni el césped, que estaba lo bastante húmedo para el juego español, ni una actuación arbitral displicente en algunas ocasiones, ni la tremenda afición Irlandesa que animó a su equipo hasta el final, pudo con nuestra selección liderada por Fernando Torres y el talento puro, el Blanquito de la Roja, Iniesta. Y es que el partido se nos de cara a los cuatro minutos, cuando Torres con un tremendo zapatazo hacía el primero de "La Roja". Estábamos por delante, dominábamos, teníamos la posesión, y sin embrago, los irlandeses generaban peligro con más facilidad las pocas veces que llegaban.
En la segunda parte, empezamos mejor. Volvimos a marcar a los pocos minutos, esta vez sería Silva, que entre tres rivales consiguió enviar el balón al fondo de la portería. Minutos después, Torres al contraataque, y Fábregas con un disparo potente, casi sin ángulo, cerraría el segundo partido de la fase de grupos. El trofeo de mejor jugador del partido se lo llevó Torres, que se merecía algo así.
De seguir jugando a este nivel, la selección española no debería de tener ninguna dificultad para ganar ante Croacia, aunque con un empate a goles les bastaría. Italia no quiere un empate a dos porque se quedarían fuera de la Eurocopa, cosa que ya les ocurrió en 2004.
¡¡¡¡VAMOS ESPAÑA!!!!
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